jueves, 6 de marzo de 2008

Las palabras vencidas.


Al alba roja pintando los silencios, he vuelto para robarme las palabras vencidas. Un tropel de la locura que me ha vestido siempre. Algún lazo en el pelo, falda de terciopelo ... ¡ y en la boca palabras , que iban despertando. !Noche tras noche me iba dibujando al lado de la sonrisa ingenua, que iluminaba el rincón de mi cuarto, donde vivían mis cuentos!. Unos duendes pequeños , han escrito mi vida en surcos de alegría o de tristeza. En un día perdido, me dí cuenta, de que era más poderoso que yo misma, el rostro de un papel vacío. Una mirada bastaba para que me acercara hasta su aroma y su color tardío. Sin darme cuenta, muy cerca, un lápiz me esperaba. Una tras otra, las palabras giraban raudas en la ruleta de mi cabeza y pasaban hacia las pálidas páginas. Se cerraban mis juegos y se abría mi mundo de sueños escondidos en mágicas historias. Hoy todavía siento como me bailan mariposas entre los dedos, al mirar los dibujos de las letras. Son mías. Me duermo y me despierto con ellas. Me enseñan y me guían entretejiendo algún destino. Me acerco sin poder, ( ni querer ), evitarlo hasta su desnudez capciosa. Un encuentro furtivo más de una vez. Escondiendo el papel de los ojos estúpidos que se creen poderosos, porque dominan mis rutinas del día a día. Pero hay un punto, donde no llega la oscuridad de esos ojos. ¡ Son mis palabras ! Escritas con silencios de un alma cautiva. Es entonces cuando recorro la noche despejada. Y al alba roja, pintando los silencios, me acomodo en sus voces y me dejo acunar, para poder robarme ... ¡ las palabras vencidas !.